La selección nacional de Marruecos logró una clara victoria en Costa de Marfil (0-2) que la clasifica para el Mundial de Rusia, el primero que disputará desde Francia 1998.
Con este triunfo, los “Leones del Atlas” se garantizan el primer puesto del grupo C de las eliminatorias africanas, que otorga el pase directo a la fase final del Mundial.
Además, Marruecos completó la hazaña de finalizar esta fase, en la que superaron a Gabón y Mali además de a los marfileños, sin haber recibido un solo gol en contra.
En el duelo disputado en Abiyán, la defensa marroquí fue más protagonista que nunca, ya que fueron dos zagueros, Dirar y Benatia, los autores de los goles.
Todo lo contrario que en el bando de los “Elefantes”, que fueron penalizados enormemente por sus errores atrás y por la mala actuación de su portero, Gbohouo.
Aunque estaba obligada a ganar (Marruecos tenía un punto de ventaja en la clasificación y le bastaba con el empate), Costa de Marfil tuvo una actuación decepcionante y, pese a verse con un 0-2 en contra desde el minuto 30, no consiguió poner en apuros a los magrebíes.
Desde el principio del choque, Marruecos estuvo cómoda mientras esperaba a los “Elefantes”, y, gracias a la solidaridad mostrada por sus atacantes a la hora de defender, pudo mantener protegida la portería de Munir, guardameta del Numancia.
Por otra parte, la selección de fútbol de Túnez empató sin goles frente a la de Libia y obtuvo el punto que le bastaba para asegurar su presencia en Rusia 2018, el quinto Mundial en su historia y el primero desde Alemania 2006.
El conjunto de Nabil Maaloul prefirió no correr riesgos ante un rival sin nada en juego. La presión la acaparaba el otro duelo del grupo, el que disputaron la República Democrática del Congo y Guinea. El conjunto congoleño aún suspiraba por la clasificación. Pero para ello necesitaba ganar su partido pero que Túnez cayera contra Libia.
El Congo ganó y terminó segundo a un punto del Mundial. Túnez no falló en el estadio Olímpico de Rades, que se convirtió en una fiesta permanente hasta el final, cuando se celebró el retorno tunecino a una fase final.
El duelo careció de riesgos y grandes oportunidades. Especialmente la segunda parte, cuando Túnez optó por mantener el balón ante un rival inofensivo, que terminó en el tercer puesto del cuarteto, solo por delante de Guinea.
El choque terminó sin goles y con la quinta presencia mundialista para Túnez, que regresará a esta competición después de Alemania 2006. Antes estuvo en Argentina 1978, en Francia 1998 y en Corea y Japón 2002. Nunca logró atravesar la primera fase.
Ambos países se unieron a Nigeria, Egipto y Senegal como los representantes africanos en el próximo Mundial de Rusia 2018.
EFE
Foto: fifa.com
Lavinotinto.com