El club brasileño Sao Paulo pretende vetar el uso de sus símbolos oficiales por parte de las barras bravas, con las que rompió relaciones después de los disturbios tras el partido por la Copa Libertadores de fútbol ante el colombiano Atlético Nacional.
Según recogen diferentes medios, el Sao Paulo estudia ir ante la Justicia para impedir que las barras bravas usen los símbolos del club, en una acción similar a la que ya instauró el Cruzeiro de Belo Horizonte con sus “torcidas organizadas” (afición organizada).
Las relaciones entre las barras bravas y el club comenzaron a deteriorarse desde comienzo de año durante un partido de la Copa Sao Paulo de Juniores, el principal torneo Sub-20 del país, disputado ante el Rondonópolis en la ciudad paulista de Mogi das Cruzes y en el que la barra Independente causó disturbios.
La Alcaldía de Mogi das Cruzes demandó al Sao Paulo por los daños ocasionados al patrimonio público y exige una indemnización por cinco millones de reales (unos 1,5 millones de dólares), en un proceso que camina en la Justicia.
La administración del Sao Paulo llegó a admitir que “ayudaba” a las barras bravas con entradas para los partidos y dinero para patrocinar a sus escuelas de samba en el carnaval paulista.
El motivo para el fin de las relaciones entre el club y las barras bravas fueron los disturbios, cuando el Sao Paulo perdió por 0-2 ante los colombianos en el partido de ida de la semifinal de la Libertadores y en la salida los seguidores del propio equipo brasileño se enfrentaron entre ellos mismos.
La gresca tuvo que ser dispersada por la Policía, que utilizó gases lacrimógenos y balas de goma, en un enfrentamiento que terminó con nueve personas presas y doce agentes heridos con las botellas de vidrio y explosivos lanzados por los aficionados.
El “Tricolor Paulista” canceló la entrega de un paquete de entradas para las barras bravas que viajarán a Medellín para el partido de vuelta del próximo 13 de julio.
En un comunicado, en el que reiteró su disposición de colaborar con las autoridades, el Sao Paulo reconoció que la mayoría de los integrantes de las barras bravas “tienen un buen comportamiento”, pero indicó que “no comparte” las acciones de los pocos hinchas violentos que causan los disturbios.
EFE
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