Dar un mejor fin a su carrera en la selección brasileña que no sea el cuarto lugar en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro pasó por la cabeza pero no hizo cambiar a la centrocampista Miraildes Maciel Mota “Formiga” su decisión de decir adiós a los 38 años.
“Sólo tengo que agradecer a los brasileños por esta fuerza, por este apoyo. Por todo lo que pasamos, lo que conquistamos. No es que no hubiéramos querido más”, dijo la combativa jugadora al término del partido por la medalla de bronce que las anfitrionas perdieron en Sao Paulo por 1-2 ante Canadá.
Formiga, la única jugadora que ha jugado en las seis ediciones de los Juegos Olímpicos en las que ha estado el fútbol femenino, fue fundamental en la conquista de las dos medallas de plata que Brasil, en Atenas 2004 y Beijing 2008.
Si Formiga confirmó su salida de la Canarinha, Marta, quien fue por cinco veces seguidas la mejor jugadora del mundo, dejó en suspenso su continuidad tras el partido jugado ante unas 38000 personas en el estadio Arena Corinthians. “No sé. Solo el tiempo lo dirá”, afirmó la capitana.
“Pido al pueblo brasileño que no deje de apoyar al fútbol femenino. Necesitamos de ustedes. Intentamos mejorar la modalidad, logramos llenar estadios”, dijo la número diez entre sollozos.
EFE
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