La desesperación de Uruguay comenzaba a ser más visible con el paso de los minutos, pues solo le servía un triunfo sobre Italia para acceder a octavos de final de la Copa del Mundo Brasil 2014. Un ejemplo de ello, falto en toda la regla de deportividad y que, podría desencadenar consecuencias negativas para el elenco celeste, fue el mordisco que propinó Luis Suárez a Giorgio Chiellini restando 10 minutos para el pitazo final.
Tras el cobro de un tiro de esquina, el ‘Conejo’, en el área rival, muestra intención de saltar para buscar el balón, pero en la caída muerde el hombro izquierdo del defensa azzurro, quien, en respuesta, soltó un codazo. El dorsal 3 reclamó al principal mexicano Marco Rodríguez, mientras el delantero uruguayo manifestó gestos de dolor en su rostro.
Aun así la suerte estuvo de parte de los sudamericanos. Al 81′, en otro ‘córner’, el central Diego Godín, así como en la final de la Liga de Campeones frente al Real Madrid, cabeceó el esférico al primer palo de Gianluigi Buffon que nada pudo hacer para impedir la eliminación de su equipo nacional en la fase de grupos por segunda edición consecutiva.
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Foto: EFE
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