Si bien el seleccionador argentino, Alejandro Sabella, apostó hace dos años por una dupla de defensas centrales, Martín Demichelis espera su oportunidad en el banquillo con su basta experiencia.
Ezequiel Garay y Federico Fernández significaron una de las apuestas más firmes del entrenador albiceleste, aunque en el momento de definir la lista mundialista no dudó en sumar al actual defensa del Manchester City a pesar de tener un año y medio de ausencia en sus convocatorias.
“No me siento atrás ni adelante de nadie. Mi personalidad no varía a la hora de desarrollarme en un grupo y a la hora de entrenar porque en cada práctica grito, ordeno y hablo porque es parte de mi forma de ser”, enfatizó el experimentado jugador de 33 años.
En su segundo Mundial luego de la experiencia en la cita de Sudáfrica 2010, el exjugador de River Plate, Bayern Munich de Alemania y Málaga añadió: “En esas indicaciones de cada práctica no me fijo si al que le estoy hablando jugó de titular o de suplente”.
“Me siento uno más y pienso en colaborar porque sueño con ser campeón mundial. Mi experiencia me hace disfrutar cada entrenamiento, porque las diferentes circunstancias en cualquier momento te pueden hacer saltar dentro del campo”, acotó.
En relación a los distintos planteamientos del seleccionador albiceleste, ponderó: “Hay que trabajar y sentirse al cien por ciento porque es importante para el entrenador mirar hacia el banco de suplentes y sentirse respaldado y con varias posibilidades. Alejandro (Sabella) es un entrenador que no juega con un solo sistema”.
Martín Demichelis, que le ganó el puesto final en la lista mundialista a Nicolás Otamendi, resaltó la principal virtud de esta plantilla: “Este es un grandísimo grupo, que pone en prioridad a lo colectivo por encima de lo individual, pese a tener excelentes jugadores, de los mejores del mundo”.
Con gran experiencia en la Bundesliga y por conocer en profundidad al técnico holandés Louis van Gaal analizó este comienzo de la Copa del Mundo: “Hasta el momento hubo dos equipos destacados. Alemania, conozco mucho a los chicos que jugaron porque viví ocho año allí, y Holanda, del que respeto a su entrenador y es uno de los mejores”.
El defensa, que terminó siendo titular en el campeón inglés Manchester City, destacó con respecto a la actualidad del conjunto albiceleste: “Obviamente que ganar el primer partido trae mucha tranquilidad y este grupo que tiene una gran armonía supo asumir ese difícil compromiso como lo haremos con los próximos dos de la zona ante Irán y Nigeria”.
“El equipo tuvo aciertos y errores típicos de un primer partido de Mundial, pero se consiguió el gran objetivo que era ganarle a Bosnia en el debut”, finalizó.
EFE
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