El seleccionador de Costa Rica, Óscar Ramírez, se disculpó con los aficionados de su país por la goleada encajada por su selección ante Estados Unidos por 4-0. Ramírez consideró que futbolísticamente sus jugadores fueron muy superiores.
“Fue uno de los partidos más extraños. Futbolísticamente fuimos muy superiores, tuvimos el control, pero en el fútbol hay que anotar y Estados Unidos recibió una calificación muy alta” explicó el seleccionador tico en la rueda de prensa posterior al partido.
A su juicio, el tercer y cuarto gol cayeron en momentos claves para el desenlace del juego, justo antes del final de la primera mitad. “A pesar de ello no nos cerramos atrás, lo hicimos por orgullo, es mi estilo, pero hoy Estados Unidos estuvo muy efectivo”, añadió el técnico, que reconoció que la derrota le complica el futuro en la competición y que a sus jugadores no les salió nada.
“No les puedo recriminar nada a los jugadores, hicieron todo lo que les pedí. Es solamente un golpe duro, una derrota que duele y nos topa el orgullo”, continuó Ramírez.
La derrota ante los anfitriones tocó el orgullo de los costarricenses y supone una lección muy importante para el futuro. “Estoy en un proceso, tengo diez meses a cargo de la selección. Hay que aprender lo más que se pueda para corregir los detalles”, concluyó el entrenador.
EFE
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