El potencial ofensivo de los Yanquis de Nueva York surgió de la mano de Todd Frazier y Aaron Judge para dominar a los Astros de Houston en el tercer partido de la Serie de Campeonato de la Liga Americana que ganaron por paliza de 8-1.
La vuelta a su campo del Yankee Stadium resultó el mejor revulsivo para los bateadores de los Bombarderos de Bronx, que siempre estuvieron en control del marcador y del partido.
Frazier y Judge aportaron sendos cuadrangulares de tres carreras cada uno para hacer la diferencia en la ofensiva de los Yanquis, que en Houston había estado silenciado durante los dos primeros partidos, que ganaron los Astros (2-1).
El triunfo fue el primero de los Yanquis en una serie de campeonato desde 2010, rompiendo una racha de siete derrotas que se remontaba al duelo que perdieron en seis partidos ante Vigilantes de Texas.
«Es la victoria que nos permite meternos de lleno en la serie al no haber cedido ningún juego en nuestro campo y cortamos la racha ganadora de los Astros», declaró Joe Girardi, piloto de los Yanquis. «Hicimos un partido completo y no les dimos opción de reacción».
El veterano abridor zurdo C.C. Sabathia, en su papel de paladín que ejerció durante toda la temporada, volvió a responder desde el montículo al cubrir seis entradas en blanco frente al equipo que más carreras anotó en las mayores en la campaña regular.
El zurdo de 39 años tuvo marca de 9-0 y efectividad en 1.71 en 10 aperturas tras derrotas del equipo de Nueva York.
Tras haber sido silenciados por los abridores estelares de los Astros, Dallas Keuchel y Justin Verlander, en un par de reñidos partidos que perdieron con idénticas pizarras de 2-1 en Houston, los bates de Nueva York despertaron frente al lanzador Charlie Morton, que inició el partido con Houston.
Los Yanquis eclipsaron su producción de los primeros dos juegos cuando Frazier (el tercera base que adquirieron de los Medias Blancas de Chicago sobre la fecha límite de canje) aportó por la banda contraria su jonrón en la parte baja del segundo, tras hacer contacto a una recta de 95 millas por hora en cuenta de 1-1.
La reacción de Frazier tras el cuadrangular mezcló algarabía y perplejidad.
Después de todo, su swing no fue del todo compacto, beneficiándose de la corta distancia por el bosque derecho, de 314 pies. Y otro detalle: solo dos de sus 27 cuadrangulares en la campaña viajaron por esa dirección.
«Tal vez tuve un poco de suerte, pero la realidad es que la pelota se fue por encima de la barda y eso era lo que buscábamos, darle la ventaja a CC (Sabathia) para que pudiese hacer mejor su labor, sin presión», valoró Frazier.
Judge consiguió otro vuelacerca de tres carreras dentro de un racimo de cinco anotaciones que los Yanquis anotaron en el cuarto episodio y que dejaron prácticamente sentenciado el triunfo del equipo neoyorquino de la Liga Americana.
De 7-1 en los primeros dos partidos, Judge logró su segundo jonrón de la postemporada a una recta de 93 millas del relevista Will Harris.
Judge sumó dos ponches más para quedar con 21 este octubre, pero el toletero novato también se destacó a la defensiva, estrellándose contra la cerca del derecho para engarzar un batazo del primera base cubano de los Astros, Yuli Gurriel.
Otra señal alentadora para los Yanquis fue el primer imparable de un bateador designado en la postemporada, conectado por Chase Headley en el cuarto.
También pudieron mantener silenciado al toletero venezolano José Altuve y al boricua Carlos Correa, los bateadores más prolíficos, de 8-1 en el juego tras irse de 15-8 en Houston.
Correa falló en la mejor oportunidad de los Astros ante Sabathia al elevar hacia el campocorto holandés Didi Gregorius con las bases llenas en el tercero.
Frente a la peligrosa alineación de Houston, Sabathia trabajó con cautela y se sostuvo con un punzante slider. Permitió tres imparables, concedió cuatro boletos y recetó cinco ponches al no permitir carreras por primera vez en 21 aperturas de la fase final.
Morton cargó con la derrota tras permitir siete carreras y seis indiscutibles con dos boletos en los tres episodios y dos tercios que trabajó.
Nada que ver de lo que hicieron sus compañeros que le antecedieron en el montículo como fueron Keuchel y Verlander en los primeros dos desafíos.
«Esta vez si tuvimos paciencia en los momentos decisivos y ahí estuvo la diferencia de lo que al final reflejó el marcador», subrayó Girardi.
Houston evitó la blanqueada en el noveno al anotar tras un boleto con las bases llenas, y Altuve dio fin al juego al batear para doble play.
Los Astros solo han podido dar 15 indiscutibles en los primeros tres juegos.
El abridor Sonny Gray saldrá para iniciar con los Yanquis el cuarto partido después de tener 11 días de descanso, posiblemente ante Lance McCullers o Brad Peacock, que trabajará con los Astros.
EFE
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