La selección peruana realizó su primer entrenamiento con los veintitrés jugadores convocados para disputar la Copa América Centenario, incluido el delantero del Flamengo brasileño Paolo Guerrero.
El único jugador que se ejercitó por separado fue el defensa de Deportivo Municipal Aldo Corzo, quien termina de recuperarse de unas molestias físicas que arrastra desde la semana pasada.
El mediocampista del Feyenoord holandés Renato Tapia, quien terminó el partido amistoso con Trinidad y Tobago con un leve esguince de tobillo, completó la sesión de entrenamiento con normalidad.
El combinado dirigido por el argentino Ricardo Gareca trabajó jugadas de ataque con una delantera formada por Paolo Guerrero y Raúl Ruidíaz, y conceptos tácticos en espacio reducido del campo de entrenamiento.
Ruidíaz, que se quedó sin participar en el encuentro amistoso con Trinidad y Tobago por problemas físicos, practicó los disparos a portería con el arquero Carlos Cáceda, su compañero de equipo en Universitario de Deportes.
La Blanquirroja también recibió la visita del centrocampista del Wolfsburgo alemán Carlos Ascues, uno de los jugadores descartados por Gareca para esta Copa América después de haber estado presente en la edición del torneo disputada el año pasado en Chile.
El entrenamiento fue el último de la selección peruana en Lima, ya que viajará a Washington para enfrentarse a la selección de El Salvador en su última prueba antes de iniciar su participación en la Copa América Centenario, donde se medirá a Brasil, Ecuador y Haití en el grupo B.
Los peruanos golearon el lunes a Trinidad y Tobago por 4-0 con los tantos de los delanteros Luiz Da Silva y Édison Flores y de los mediocampistas Christian Cueva y Cristian Benavente.
EFE
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