Un disparo lejano de Miguel Almirón le permitió a Paraguay imponerse este jueves por un ajustado 0-1 a la selección de Bulgaria en un partido amistoso en el que los de Eduardo Berizzo pusieron a prueba su nuevo estilo de fútbol de posesión ante un débil rival que apenas dispuso de ocasiones.
Siguiendo las instrucciones del técnico argentino, la selección paraguaya se convirtió en dueña de la posesión durante todo el primer tiempo, sin embargo, no logró transformar su superioridad en forma de goles.
El mediapunta del Newcastle United, Miguel Almirón, reconvertido a extremo por el técnico, se erigió como el mayor peligro de la Albirroja con sus centros desde el costado izquierdo y sus circulaciones largas con el balón.
Mientras, los búlgaros aguardaban agazapados en defensa a la espera de que su pareja de delanteros, formada por Ivelin Popov y Marcelinho Da Costa, pudieran encontrar espacios en un contragolpe.
La primera ocasión llegó por medio de Alejandro Romero que disparó en el minuto 18 una falta directa desde la frontal del área que obligó a Georgi Goergiev a estirarse para mandar el balón a córner.
Antes de llegar al descanso, Romero desperdició otra ocasión de ponerse por delante en el marcador, cuando falló un mano a mano contra el guardameta búlgaro que detuvo con el cuerpo un disparo centrado del delantero paraguayo.
Tras el paso por los vestuarios, la Albirroja siguió con el mismo estilo de posesión, pero las dificultades para encontrar el último pase, obligaron a los delanteros a buscar el gol con disparos lejanos.
Primero probó Romero, con un disparo cruzado que se marchó escorado, y después fue Almirón, quien se perfiló el balón a la izquierda y soltó un latigazo a la base del palo para poner el gol.
El gol forzó que Bulgaria adelantara sus líneas para tratar de poner las tablas en el marcador e iniciara una presión en campo rival, que permitió a Paraguay encontrar nuevos espacios.
Georgi Dermendzhiev aprovechó la segunda parte para realizar un carrusel de cambios en su equipo, que dio sangre fresca al ataque búlgaro pero que no logró aproximarse al área rival.
En los minutos finales, la Albirroja alargó sus posesiones para dormir el partido y garantizarse la victoria por la mínima sobre una Bulgaria que trató a la desesperada de empatar con jugadas a balón parado.
0- Bulgaria: Georgi Goergiev; Strahil Popov (Viktor Popov, m.85), Bozhidar Chorbadzhiysky, Goergi Terziev (Kristian Dimitrov, m.64), Ivan Gorabov; Todor Nedelev (Bozhidar Kraev, m.46), Goergi Kostadinov (Aleksandar Tsvetkov, m.79), Kristiyan Malinov, Wanderson Farias (Galin Ivanov, m.70); Ivelin Popov, Marcelinho Da Costa (Kiril Despov, m.46). DT: Georgi Dermendzhiev.
1- Paraguay: Antony Silva; Jorge Moreira, Fabián Balbuena, Gustavo Gómez, Blas Riveros; Mathías Villasanti (Santiago Arzamendia, m.90+4), Jorge Morel (Bruno Valdez, m.80), Ramón Martínez (Richard Sánchez, m.56); Miguel Almirón (Matías Rojas, m.89), Darío Lezcano (Braian Samudio, m.90+5), Ángel Romero (Lorenzo Melgarejo, m.73). DT: Eduardo Berizzo.
Goles: 0-1, m.59: Miguel Almirón,
Árbitro: Fabio Verissimo (Portugal).
Amonestados: Kostadinov, Valdez, Malinov, Almirón, Goranov.
Estadio: Nacional Vasil Levski, Sofía, Bulgaria.
EFE
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