El Fluminense estuvo gris, horizontal y prácticamente no inquietó la portería de un Nacional que, aunque permaneció todo el partido cerrado atrás, atesoró un par de buenas ocasiones al contragolpe que podrían haber desequilibrado el marcador.
Tras dos empates en casa, el Fluminense suma apenas dos puntos, uno más que el Nacional y el Argentinos Juniors, que recibe mañana al América de México, el líder del grupo 3 con tres unidades.
La primera parte fue un monólogo del Fluminense, pero un monólogo de ritmo lento, con un fútbol pesado y previsible, que facilitó las tareas defensivas a un Nacional que fue a Río de Janeiro con la única intención de mantener su portería a cero.
La pelota era totalmente de los brasileños, pero no sabían que hacer con ella una vez que pasaban de la línea divisoria del centro del campo
El Nacional taponó bien a los laterales del ‘Flu’, que carecían de la profundidad que les caracteriza, y el media punta argentino Darío Conca estaba perdido, anulado entre las cerradas líneas uruguayas y sin oportunidades de recibir ni de dar el último pase.
Con ese panorama, las mejores ocasiones surgieron precisamente en la portería opuesta, en un par de contraataques en los que Bruno Fornaroli puso en vilo a los aficionados que acudieron al Engenhão.
Tuvo que esperar a la segunda mitad el Fluminense para comenzar a rondar con cierto peligro el arco defendido por Leonardo Burián, aunque la ansiedad creciente llevaba a los cariocas a cometer errores de coordinación, a fallar pases importantes y a caer en algún fuera de juego.
Conforme avanzaba el reloj, el Nacional comenzó a sentirse cada vez más cómodo con el empate, por lo que se replegó aún más sobre su área mientras el ‘Flu’, con más metros a su disposición, incrementaba la presión.
Volcados totalmente al ataque, los locales dejaron la espalda desprotegida a los contraataques y casi se llevan un mal trago en una ocasión en la que los uruguayos a punto estuvieron de llevarse los tres puntos.
Aprovechando un fallo defensivo, Santiago García se escurrió entre toda la zaga de los brasileños y superó al portero, pero se le adelantó el balón demasiado y acabó mandando el remate al graderío.
Los brasileños dispusieron en los últimos minutos varias ocasiones que rondaron la portería, pero ninguna que obligaran al arquero Leonardo Burián a hacer ninguna acrobacia o exhibición para salvar a su equipo.
0. Fluminense: Ricardo Berna; Mariano, Digão (m.73, Araújo), Gum, Leandro Euzébio; Edwin Valencia (m.59, Tartá), Diguinho, Marquinho (m.81, Souza), Darío Conca; Carlinhos y Rafael Moura. Entrenador: Muricy Ramalho.
0. Nacional: Leonardo Burián; Gabriel Marques, Alejandro Lembo, Sebastián Coates, Christian Núñez; Matías Cabrera (m.56, Maximiliano Calzada), Facundo Píriz, Mauricio Pereyra; Nicolás Vigneri, Bruno Fornaroli (m.61, Santiago García) y Tabaré Viudez (m.71, Flavio Córdoba). Entrenador: Juan Ramón Carrasco.
Árbitro: El paraguayo Carlos Amarilla amonestó a Bruno Fornaroli, Darío Conca, Matías Cabrera, Facundo Píriz, Santiago García y Rafael Moura.
Incidencias: Partido de la segunda jornada del grupo 3 de la Copa Libertadores jugado en el estadio Engenhão de Río de Janeiro, ante cerca de 10.000 espectadores.
