Marcos Mathías, ayudante del seleccionador de Venezuela, Rafael Dudamel, dijo que la clasificación de la Vinotinto al Mundial sub’20 es “un justo premio” y lo comparó como una “pequeña válvula de escape” para los problemas del país.
“Pareciéramos ser una pequeña válvula de escape a todos los problemas que presentamos como país”, dijo Mathías al ser preguntado durante la conferencia de prensa posterior al partido contra Argentina por la repercusión entre los venezolanos de la campaña exitosa de su selección juvenil en el Campeonato Sudamericano que termina hoy en Ecuador.
Venezuela se clasificó hoy al Mundial de la categoría, que se jugará en mayo y junio en Corea del Sur pese a perder por 2-0 ante Argentina.
El técnico, quien compareció ante los medios de comunicación en lugar de Dudamel, sancionado, destacó que el trabajo de la selección es para los aficionados que respaldan al equipo y consideró que muchos compatriotas se sumarán en adelante con su apoyo, por lo que expresó su agradecimiento.
“Seguimos firmes trabajando”, dijo, “pensando que el futuro de Venezuela tiene que estar en la elite”.
Al hacer balance del torneo, opinó que la etapa de grupos fue “más compleja” porque desde el comienzo había nervios entre los jugadores debido a la presión por calificar para la fase final, lo que el equipo consiguió al cosechar cuatro empates en los cuatro encuentros.
Mathías subrayó la importancia del punto logrado en el primer partido, contra Uruguay, hasta ahora líder del torneo, y consideró que, desde ese momento, el conjunto tuvo más confianza y, aunque no fue especialmente efectivo, se mostró como un grupo estable.
En el hexagonal final “nos pudimos soltar un poco más” y junto a ello, el hecho de jugar en un campo en mejores condiciones ayudó a Venezuela a “sacar lo mejor” de si misma”, aseveró.
EFE
Foto Prensa Vinotinto