Las grandes diferencias de puntos reflejadas en los marcadores finales son la nota dominante que se ha dado hasta ahora en los partidos de playoffs de la NBA, además del incremento de audiencia en la televisión.
En el primer partido de la fase final de la NBA, los Cleveland Cavaliers ganaron por apenas un punto a los Indiana Pacers y no aseguraron el triunfo hasta el último segundo.
Pero esa igualdad desapareció y los actuales campeones de liga barrieron la serie con claras ventajas en los marcadores y lo propio sucedió ante los Toronto Raptors en la eliminatoria de semifinales de la Conferencia Este.
Los finales emocionantes en los encuentros de esta fase de playoffs han sido más bien una excepción como lo demuestra que tras haberse disputado 68 partidos, el margen promedio de victoria ha sido de 12,9 puntos.
Más de la mitad de los 23 partidos disputados en mayo se ha resuelto por una diferencia de 25 puntos o más.
Se ha impuesto un récord de la fase final, con cuatro barridas de 4-0, todas logradas por los Golden State Warriors y los Cavaliers.
Ambos se han combinado hasta ahora con marca perfecta de 19-0 y parecen marchar inexorablemente hacia un nuevo duelo en las Finales de la NBA.
Los aficionados que prefieren de grandes puntuaciones y palizas al equipo rival en los partidos deben disfrutar al máximo este año, pero a los aficionados que buscan un baloncesto más en equilibrio no tienen la misma sensación.
“Las ventajas y triunfos por más de 10 puntos en partidos de playoffs anteriormente se consideraban como sorpresa”, admitió el entrenador de los Cavaliers, Tyronn Lue. “Pero por ahora son parte de la nueva realidad”.
Lo que significa que cada vez hay menos sorpresa y mayor diferencia entre los mejores y los peores equipos.
Sólo ocho partidos de esta fase final se han decidido definido por tres puntos o menos. En 40, la diferencia ha sido de 10 tantos o más, una proporción mucho más alta que el promedio de la NBA durante los últimos 30 años.
Los Spurs tienen un triunfo por 39 tantos y una derrota por 36, ambas veces sin su alero estelar Kawhi Leonard.
La única “sorpresa” en una serie que se ha dado hasta ahora ha sido el triunfo de los Utah Jazz, quintos clasificados durante la temporada regular, que eliminaron en la primer ronda de los playoffs de la Conferencia Oeste a Los Ángeles Clippers, cuartos.
Aunque ni tan siquiera puede entrar como una sorpresa deportiva porque ambos acabaron la temporada regular con la misma marca de 51-31.
El sentir de los profesionales de la NBA es que con las grandes diferencias que se dan actualmente en los marcadores finales de los partidos, el gran aliciente que tiene la competición de los playoffs de ser la más disputada y con mayores emociones de la temporada, de momento, en lo que va este año ha desaparecido.
Sin embargo, esa ausencia de grandes emociones que generan los marcadores ajustados no han desanimado a los aficionados que han agotado la compra de todas las entradas en cada uno de los partidos disputados, cuarto año consecutivo que se da este fenómeno.
Las entradas para las dos series de semifinales que disputan los Cavaliers ante los Boston Celtics y los Warriors frente a los Spurs están también agotadas.
Además, el promedio de telespectadores que han visto hasta ahora los partidos ha sido de 3,7 millones, lo que significa un incremento combinado del tres por ciento, en comparación al año pasado.
EFE
Lavinotinto.com