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La violencia dijo “presente”

Una vez más la violencia fue protagonista en uno de los estadios del fútbol venezolano. Esta vez, el estadio Brígido Iriarte de la ciudad de Caracas fue el lugar donde se presentaron nuevos hechos violentos

Luego del encuentro de la tarde sabatina, correspondiente a la jornada 11 entre el Real Esppor Club y el Club Deportivo Táchira, nuevos hechos de violencia se llevaron a cabo; esta vez en las afueras del estadio Brígido Iriarte.

Aproximadamente media hora después de finalizado el partido, en el que el Deportivo Táchira salió derrotado por el Real Esppor, personas corrían por las afueras del estadio, ya que al parecer, algunos seguidores del Caracas Fútbol Club, hicieron acto de presencia en espera de la barra del Deportivo Táchira; quienes se lanzaron piedras y se golpearon, quedando algunos de ellos heridos.

Una tarde que había transcurrido de manera tranquila dentro del estadio, se convirtió en un total campo de batalla en sus afueras. Personas que caminaban al salir del partido, tuvieron que correr y buscar refugio para no salir lastimados. Además, algunos carros salieron afectados, hasta con parabrisas rotos debido a piedras lanzadas.

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Testigos en el lugar de los hechos
Un aficionado del Caracas Fútbol Club que se encontraba en el lugar al momento del enfrentamiento, comentó que a la hora de la salida del partido, algunos llamados “hinchas” del Caracas, estaban esperando a la barra Aurinegra; al estos salir, comenzó un intercambio de lanzamientos de piedras, golpes y según comenta esta persona que no quiso ser identificada, hasta heridas con armas blancas.

Dijo ser seguidor del Caracas Fútbol Club, y que a pesar que sabe que los agresores están identificados como hinchas del Caracas, la barra “está en contra de esto”, pero que aquellos que salieron heridos “no son ningunos santos”.

Cada quien tendrá su versión, pero de igual manera los dos grupos estuvieron involucrados en los enfrentamientos y hechos en los que salieron afectadas no sólo algunas personas, sino también algunos carros y autobuses que allí se encontraban estacionados.

La policía al final logró detener esta batalla, pero ya era muy tarde, y una vez más no se pudo controlar a tiempo a estos llamados hinchas, que empañan el fútbol nacional con este tipo de comportamiento.

Por Alexandra Cuevas Alliegro
Foto: Daniel Rico
Lavinotinto.com

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