Fue un viernes noticioso para los venezolanos que hacen vida en los Tigres de Detroit.
Al reporte de que Bruce Rondón requerirá la Tommy John, y por consiguiente perderá el año, le siguió el cambio de José Álvarez a los Angelinos de los Ángeles de Anaheim, señaló Fox Sports.
“No me lo esperaba”, reaccionó el zurdo al otro lado del teléfono. “Pero esto es un negocio y uno sabe como trabaja esto. Ya me contacté con el equipo, vuelo (el sábado) en la noche y ya me reportaré el domingo para pitchar el lunes. Ya estoy recogiendo mis cosas del apartamento donde me estaba quedando en el spring training”.
El barcelonés prácticamente no pudo decir adiós a sus antiguos compañeros que se encontraban en Orlando, visitando a los Bravos de Atlanta, travesía que el anzoatiguense no realizó porque su próxima apertura estaba prevista para el sábado y por ello se quedó en Lakeland.
“Como ellos estaban para Orlando me tuve que despedir por mensaje de texto”, detalló. “Esto es un negocio y uno se encariña con los amigos pero es parte del juego y hay que saberlo afrontar. Veo esto como una tremenda oportunidad y solo espero volver a jugar en grandes ligas nuevamente. Los Tigres necesitaban un infielder y Anaheim me pidió”.
Los bengalíes entregaron al barcelonés para obtener a Andrew Romine, quien tiene buena reputación defensiva, para que se encargue de las paradas cortas ahora que José Iglesias no jugará en la zafra que se avecina. Dave Dombroski, gerente general de los felinos, le comentó al periodista, Jon Paul Morosi, que su nueva pieza compartirá la sexta posición con Hernán Pérez o Danny Worth, siendo casi un hecho que Eugenio Suárez comenzará el año en ligas menores.
Por Marcos Grunfeld
Foto: Zimbio.com
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