El arquero internacional chileno Johnny Herrera fue imputado formalmente en un tribunal de Santiago por quebrantar una prohibición de conducir, pero eso no le impide salir del país y podrá viajar a Brasil para disputar el Mundial.
Según informaron fuentes judiciales, la Fiscalía solicitó que Herrera firme una vez al mes en una comisaría de policía como medida cautelar mientras se desarrolla la investigación.
El arquero de la Universidad de Chile fue acusado de haber quebrantado una condena que le prohibía conducir un automóvil, castigo que recibió por haber atropellado bajo los efectos del alcohol en diciembre del 2009 en Santiago a una joven universitaria que luego murió.
El fiscal a cargo de la investigación argumentó que existen testigos e imágenes de cámaras de vídeo que demuestran que Herrera conducía su automóvil el día 23 de diciembre de 2013, pese a que legalmente no podía hacerlo.
«Siempre ha dado la cara cuando ha debido enfrentar problemas y hoy enfrentó la acusación del Ministerio Público», dijo Vinko Fodic, el abogado del futbolista, quien sostuvo que Herrera había recibido escupitajos al llegar al tribunal.
De este modo, el arquero se reintegrará a los entrenamientos de la selección de Chile y podrá viajar a Brasil si el técnico argentino Jorge Sampaoli decide contar con él en la lista final de 23 jugadores que disputarán el Mundial.
La participación de Herrera en el Mundial ya estuvo en duda a fines de abril cuando enfrentó a la justicia por la acusación de conducir en estado de ebriedad en 2012.
La Fiscalía de Quintero, en la región de Valparaíso, condenó entonces al arquero a 150 días de presidio remitido, lo que significa que debe firmar periódicamente en un recinto de la Gendarmería (guardia de prisiones).
EFE
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