La liga argentina, una de las más importantes del ámbito latinoamericano, tendrá de nuevo presencia criolla, con tres exponentes del fútbol venezolano que pasarán a engrosar la lista de nacionales en canchas sureñas.
Desde finales de los años 80, la presencia vinotinto en los clubes argentinos ha sido constante, aunque puntual en cierta medida. Además, los “grandes” del balompié albiceleste han tenido pocos jugadores venezolanos en sus filas.
En la Superliga que empezó este viernes, Fernando Amorebieta, Michael Covea -quien vivirá su segunda etapa en la competición- y Darwin González se sumarán al grupo de vinotintos en el fútbol argentino.
Carlos Maldonado: Luego de destacar en la Copa Libertadores de 1987 ante Independiente y Rosario Central, el atacante dio el salto al Deportivo Armenio junto al portero Daniel Francovig.
Gilberto Angelucci: El portero perteneció varias temporadas al San Lorenzo, donde fue habitual suplente de Oscar Passet, siendo titular durante la lesión de este. Fue campeón una vez, en el Clausura 1995.
Gerson Díaz: El habilidoso volante militó en Mandiyú de Corriente en 1994. Jugó cinco partidos y marcó un gol, siendo dirigido por Diego Maradona.
Daniel Noriega: Fue el primer criollo en estabilizarse como titular en el fútbol argentino, con la camiseta de Unión de Santa Fe, equipo con el que marcó 12 goles en dos etapas entre 1998 y 2001.
Héctor González: El lateral-volante arribó en 2002 con Olimpo y empezó un importante peregrinar por clubes argentos, que incluyó a Colón de Santa Fe y Quilmes, antes de partir a Ecuador en 2004.
Miguel Mea Vitali: El mediocampista disputó ocho partidos con el Chacarita Juniors en 2003, equipo al que llegó de la mano del exseleccionador José Omar Pastoriza.
Ruberth Morán: Una lesión lo marginó de un mejor rendimiento con Argentinos Juniors, con el que militó en el Apertura 2005.
Luis Vallenilla: El lateral fue otro de los vinotintos que formó filas en Olimpo de Bahía Blanca, lo hizo en 2004, anotando un gol de palomita en su debut.
Luis Manuel Seijas: Jugó con Banfield en 2006, cuando cedido por el Caracas FC, aunque una lesión le impidió tener mayor presencia.
Oswaldo Vizcarrondo: El central tuvo su primera experiencia con Rosario Central en 2007 pero no pudo asentarse por una lesión. En 2011 militó en Olimpo. Con Lanús tuvo un paso destacado hasta que en 2013 se marchó a Francia.
César González: El mediocampista ofensivo tuvo una fructífera trayectoria en Argentina. Jugó con Colón, Huracán, donde estuvo cerca de ser campeón en el Clausura 2009, y Gimnasia La Plata. Además fue parte de la histórica campaña de River Plate en el ascenso argentino en 2012.
Gabriel Cichero: El defensa formó parte de Newell´s Old Boys entre 2010 y 2011, antes de partir al fútbol francés.
Grenddy Perozo: El zaguero participó con el Olimpo a inicios de 2012, ocupando el lugar dejado por Oswaldo Vizcarrondo. Disputó ocho cotejos y anotó un gol.
Michael Covea: El mediocampista ofensivo jugó con el San Martín de San Juan, conjunto con el que logró el ascenso y jugó 12 partidos en primera división en 2015, antes de que quedase marginado hasta finales de 2016 por diferencias con la dirigencia sanjuanina.
Darwin González: El volante ofensivo llegó para la actual Superliga cedido por el Deportivo La Guaira al Patronato de Paraná.
Fernando Amorebieta: Con una hoja de vida más que llamativa entre España e Inglaterra, el central llegó a Independiente como refuerzo para la Superliga y ya debutó en la Copa Sudamericana.
Junto a ellos, otros venezolanos llegaron a planteles de la máxima categoría argentina, pero no pudieron ver acción: Gabriel Miranda (Platense), Félix Hernández (Talleres de Córdoba), Ricardo Páez (Lanús), Yonathan Del Valle (Huracán).
Gianfranco Ruggiero y Javier Rivera
Foto: Archivo
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