Alejandro Guerra se convirtió en el segundo venezolano en la historia que jugará una final de la Copa Libertadores, tras aportar con su ingreso en el segundo tiempo en la victoria del Atlético Nacional colombiano contra el Sao Paulo brasileño.
“Hago lo que me pide el cuerpo técnico, lo que me ha dado resultado es tocar y pasar sin balón”, analizó el caraqueño en la rueda de prensa posterior a la semifinal de vuelta jugada en Medellín. “El equipo entiende el juego cada vez más y yo aprovecho la inteligencia de cada compañero. El equipo está ratificando el buen momento”.
Sao Paulo se adelantó en el marcador temprano, pero el elenco verdolaga respondió pronto para el empate y en la segunda mitad ratificó la clasificación: “Sabíamos que ellos jugarían con la necesidad del resultado y salieron a presionar. Nos tapaban las salidas, a veces tocaba tirar el balón largo. Ellos se agotaron porque no podían mantener esa presión todo el tiempo, nuestros muchachos tomaron mejores decisiones y les hicimos más daño”.
Guerra fue el protagonista de la jugada que derivó en el penalti que definió el compromiso: “Después del partido vimos la repetición en el camerino: el jugador salta con la mano despegada del cuerpo, es un penal claro”.
Atlético Nacional está a la espera de su rival en la final copera, en la que iniciará como visitante y definirá en el estadio Atanasio Girardot de la capital paisa: “De visitante o de local salimos a buscar el resultado, tenemos que estar atentos. Cualquiera que nos toque será difícil, a nuestro equipo lo conocen y hay que trabajar el partido día a día para traernos un buen resultado”.
“Preferiría a Boca porque es algo que no pasa todos los días y es un privilegio jugar en La Bombonera, pero Independiente del Valle tiene su sueño todavía, juega en la altura y tiene jugadores rápidos adelante”, agregó el “Lobo” acerca del adversario que se conocerá en la noche del jueves.
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