Al Deportivo Anzoátegui se le complicó el panorama luego de caer frente al Real Esppor Club 2-0. A tan sólo una jornada para finalizar el torneo, y con un Zamora que se puso arriba de los aurirrojos por un punto, la jornada 17 de este clausura será decisiva. Nada está escrito en este fútbol hasta que finalicen los 90 minutos de esa jornada 17, lo que sí tienen claros los del equipo oriental, es que no queda otra opción que ganar frente a Trujillanos, y esperar que Zamora pierda o empate, para así poder llevarse el clausura y la estrella, sin necesidad de una final.
El capitán de los aurirrojos, Juan Fuenmayor, aseguró que en el primer tiempo de este encuentro ante el Esppor, habían tenido más oportunidades, pero que lamentablemente no concretaron. “Después caímos en el desespero; el árbitro a mi modo de ver también influyó mucho con sus decisiones, no es una excusa para lo que pasó en el resultado, pero bueno, son cosas que sin lugar a dudas nos hicieron caer en el desespero. También nos pegó el cansancio de tantos partidos seguidos, pero ya no hay excusas, estamos conscientes de que necesitábamos estos tres puntos”.
Un cansancio que comenzó a pasar factura en un Deportivo Anzoátegui que desde que inició el torneo, y con una fase previa de Libertadores, había puesto el cien por ciento en cada partido, y que ya en esta recta final, con una plantilla corta, era inevitable que apareciera ese cansancio. “Con una plantilla corta y también con dos o tres lesionados de los pocos delanteros que teníamos. Gracias a Dios vamos a tener una semana larga para recuperar piezas y la parte física. Tenemos que seguir poniendo las cosas en manos de Dios, los milagros pasan, todavía estamos a un punto y esto es lo bonito del fútbol, que hasta el último minuto hay que luchar porque no se sabe qué pueda pasar en todo esto”, expresó Fuenmayor.
Jugador que por cierto se perderá ese último y decisivo partido ante Trujillanos, ya que recibió una tarjeta roja directa ya finalizando el encuentro ante el Real Esppor. “Pequé un poquito de la adrenalina y de la frustración de la que nadie está exento. Si se sufre cuando se está jugando el partido normal, imagínate lo que será verlo y estar pendiente de los otros resultados; no va a ser fácil el próximo fin de semana; pero en estos momentos hay que darle el apoyo a los muchachos, jugamos en casa y hay que matar o morir; hay que transmitirles todo lo que se pueda desde afuera y seguir rezando”, dijo.
Una semana para prepararse, la obligación de sumar los tres puntos independientemente de lo que ocurra en los otros partidos, y las ganas de ganar esa estrella sin necesidad de jugar una final, son los factores que en este momento rodean a un Deportivo Anzoátegui que a pesar de haber tenido una gira negativa por Caracas esta semana, aún tiene posibilidades de coronarse campeón del clausura.
“Borrón y cuenta nueva, tenemos que saber que la esperanza es lo último que se pierde, tenemos que ganar y seguir luchando porque no se sabe qué es lo que puede pasar. No bajar la cabeza, no dejar de luchar, saber que tenemos una semana larga para recuperar energías, y saber que todavía hay motivos para luchar. Y en el peor de los casos, también pensar en que tenemos que llegar muy bien a la final si se da. Lo bueno de este equipo es que mentalmente estamos convencidos de que podemos luchar para lograr el objetivo”, concluyó el capitán del Deportivo Anzoátegui Juan Fuenmayor.
Alexandra Cuevas Alliegro
Foto: Carlo Dragone
LaVinotinto.com
