Con el fichaje de Iván Marcano, el Oporto de Julen Lopetegui tiene seis jugadores españoles en su plantilla, lo nunca visto en Portugal, y pone la guinda a un proyecto cuyos espejos son el Barcelona de Pep Guardiola y la mejor España de Vicente del Bosque.
Desde el lunes, cuando se oficializó la contratación de Marcano, el vestuario del club norteño ya cuenta con una nutrida representación española compuesta por el delantero Adrián López, el extremo Cristian Tello, el medio Óliver Torres, el lateral José Ángel, el portero Andrés Fernández y el propio Marcano (central).
El fichaje del entrenador español, amante del fútbol de toque, responde al antiguo deseo del presidente del Oporto Pinto da Costa, que siempre quiso traer al club el estilo del Barcelona de Guardiola y de la España de Del Bosque.
El doble campeón de Europa (1987 y 2004) y ganador de la Liga lusa en 27 ocasiones decidió una radical ruptura con el pasado más reciente. El último curso firmó la peor temporada en décadas, sin ningún título cosechado.
Pinto da Costa, que a sus 76 años está considerado el presidente de fútbol más laureado del balompié actual, se encomendó ciegamente a un técnico poco conocido en Portugal que había dirigido a las exitosas selecciones españolas sub 19 y sub 21.
A Julen Lopetegui, de 47 años, le dio un poder para contratar que solo José Mourinho tuvo hace más de una década en el Oporto, prueba de la fe del veterano dirigente tiene en el “tiki-taka” español.
El entusiasmo en el club es evidente, como también lo es la presión que tendrá el técnico español, al que han confiado sin peros la estrategia deportiva del coloso portugués.
Además de su buena capacidad de comunicar, a Lopetegui le han reconocido sus dotes de persuasión para atraer a futbolistas españoles emergentes que difícilmente hubiesen venido a Portugal.
“Si me dicen hace unos meses que Tello venía el Oporto, no me lo creería”, reconocen muchos aficionados.
El joven internacional español, cedido por el Barcelona, fue quizá la contratación más rimbombante.
También aterrizó otro codiciado joven, Óliver Torres, cedido por el campeón español Atlético de Madrid. Según Cunha, él ha sido el que más ha deslumbrado dentro de las cuatro líneas, por su calidad y regularidad.
Un posible once titular podría juntar hasta seis españoles y otros futbolistas que han jugado en España, como el medio centro brasileño Casemiro (Real Madrid), otro triunfo de Julen Lopetegui.
Los métodos del entrenador también han agradado a la crítica que acompaña diariamente los trabajos del equipo.
El balón es el protagonista absoluto de los dinámicos entrenamientos del preparador vasco, que llegó a instalar una torre para observar los entrenamientos desde otros ángulos.
El primer gran test del españolizado Oporto es el Lille francés, en la eliminatoria de acceso a la fase de grupos de la Liga de Campeones.
Antes, este viernes, tendrá al Marítimo de Funchal como primer rival en la Liga.
Pero el estilo mascado “made in Spain” puede pasarlo mal ante los equipos pequeños de Portugal, que se presentan con las líneas muy reculadas.
Evitar los pases previsibles e imprimir velocidad son algunos de los antídotos sugeridos para que Lopetegui rompa la “maldición” de los entrenadores españoles en Portugal, cuya trayectoria ha sido discreta.
EFE
Foto: Oporto FC
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