Madrid.- El Rayo Vallecano aprovechó la inoperancia del Getafe y consiguió tres puntos gracias a un gol tempranero de Michu, que sirvió para dar un premio muy merecido a los hombres que dirige José Ramón Sandoval.
El primer derbi de la historia en Primera entre ambas entidades llegó al Coliseum con diferentes sensaciones para Getafe y Rayo Vallecano. Los dos humildes de la Comunidad de Madrid tienen pocas semejanzas. Económicamente, los primeros están mejor sostenidos que los segundos. Eso podría afectar a cualquier jugador. Que tu club esté en plena ley Concursal no debe ser agradable.
Sin embargo, eso parece haber unido a los hombres de José Ramón Sandoval. Son un equipo hecho, compacto, con ganas y hambre. Mezcla veteranía con juventud y los malos ratos que pasó a final del curso pasado han parecido unir a todo un grupo que tiene ganas de resarcirse de todo lo que pasa en los despachos.
Y así saltó al césped del Coliseum el Rayo Vallecano. Muy bien colocado y organizado, en los primeros 45 minutos no dio ninguna opción a un rival espeso y con una aparente falta de ritmo importante. Luis García decidió utilizar de inicio a Pedro León y a Dani Güiza, dos futbolistas que necesitan minutos para estar en su mejor estado de forma.
Los dos naufragaron con un centro del campo que no respondió a las expectativas. Juan Rodríguez y Mehdi Lacen nunca pudieron tomar los mandos del juego. El agujero entre la defensa y la delantera era evidente. Al final, el Getafe jugó al pelotazo desde la defensa, con «Cata» Díaz como improvisado creador del juego para desesperación de Güiza y Miku.
Entonces, Luis García sacrificó a Juan Rodríguez, que antes del descanso se marchó al banquillo para dejar su hueco a Rubén Pérez. En los últimos quince minutos del primer acto, la presencia del exdeportivista dio algo de oxígeno a su equipo, pero ya era tarde. La primera parte estaba sentenciada gracias a las virtudes del Rayo y al tempranero gol de Michu, que en el minuto tres cabeceó a la red un córner sacado por Piti.
Ese tanto fue el inicio de 45 minutos de dominio rayista y desesperación getafense, que tuvo algún susto más para irse al descanso con más goles en contra. Piti, en un mano a mano ante Moyá pudo hacer el segundo, pero mandó la pelota por encima del larguero.
Mientras, los hombres de Luis García sólo sumaron un triste cabezazo de Varela en el minuto 40. Fue el único disparo a portería de los locales.
En el segundo tiempo, el Getafe tuvo un conato de reacción con una ocasión inicial de Dani Güiza, que pudo inaugurar su cuenta goleadora personal en su regreso a la Liga española. Sin embargo, el portero Dani Giménez evitó, con una gran intervención, que el marcador reflejara unas tablas injustas.
Fue un espejismo que no atemorizó a los vallecanos. Apenas mostraron más debilidades en el resto del choque e incluso pudieron engordar el resultado con alguna ocasión regalada por sus rivales. Miguel Ángel Moyá se encargó de desbaratarlas para dar esperanzas a sus compañeros.
Al final, no hubo milagro para el público del Coliseum y el Getafe perdió merecidamente un partido en el que nunca estuvo metido. Sólo suma un punto de nueve posibles y continúa la tendencia con la que acabó el pasado curso, cuando luchó por no descender hasta la última jornada. Mientras, el Rayo sumó tres puntos que ya mereció en sus dos anteriores compromisos.
– Ficha técnica:
0 – Getafe: Moya; Varela, «Cata» Díaz, Lopo, Masilela; Pedro León (Abdel, min. 71), Juan Rodríguez (Rubén Pérez, min. 34), Lacen, Sarabia (Pedro Ríos, min. 60); Güiza y Miku.
1 – Rayo Vallecano: Dani Giménez; Tito, Arriba, Jordi, Casado; Movilla, Javi Fuego, Botelho (Pacheco, min. 83); Piti (Delibasic, min.73), Michu; Tamudo (Lass, min.56).
Gol: 0-1, min. 3: Michu.
Árbitro: Pérez Montero (Comité Andaluz). Mostró cartulina amarilla a Masilela (min. 12), Rubén Pérez (min.54) por parte local y a Botelho (min. 38), Casado (min.64), Tito (min.77) y Michu (min. 79) por parte visitante.
Incidencias: Partido correspondiente a la cuarta jornada de Primera División disputado en el Coliseum Alfonso Pérez de Getafe ante cerca de 12.000 espectadores.
EFE