Al contrario de la prensa sensacionalista peruana, el Diario Popular, periódico de Paraguay, muestra respeto por la evolución de la Selección de Venezuela, así como por el trabajo realizado por el entrenador criollo César Farías.
Con el calificativo de “petroleros”, el portal web ha dejado parada a la Vinotinto de muy buena manera de cara a lo que será el compromiso de este martes ante La Albirroja. También se resaltó aquella victoria que se consiguió ante Argentina, en la ciudad de Puerto La Cruz, que permitió darle más vida al fuego de un sueño mundialista para Venezuela.
Titulado como “Un poco de petróleo para seguir soñado”, Diario Popular publicó lo siguiente:
La Selección Paraguaya está a la espera del compromiso ante los venezolanos mañana en el Defensores del Chaco, y la urgencia de ganar es más imperante que nunca. Pero lo que hace que las cosas se compliquen en los pronósticos es que se debe presupuestar un resultado adverso, a juzgar por el enorme crecimiento del fútbol venezolano. Hace años dejó de ser la cenicienta sudamericana para competir con “caradurez” una plaza mundialista. Pensar en sumar antes de jugar sería un pecado mortal.
En años anteriores, cualquiera de las selecciones que necesitaba puntos para seguir caminando derecho en las Eliminatorias sabía que jugar ante Venezuela era asegurarse tres puntos, incluso antes del juego. Hoy por hoy las cosas cambiaron, y la Vinotinto cambió el ropaje de cenicienta por un atavío de guerra, que lo pone a la observancia de las demás participantes de la urbe sudamericana.
Argentina cayó 1-0 en sorpresiva aparición de un casi desconocido para todos: Fernando Amorebieta. Fue el villano para la albiceleste y el héroe de la patria petrolera. En el historial de enfrentamientos entre ambos, ostentar una victoria ante la siempre poderosa Argentina era soñar demasiado. Pero en el fútbol de a poco van ganando las estructuras, y las jerarquías caen por el peso del trabajo y el proceso que llevan a cabo los demás competidores con la formación de valores nacidos en la cantera, a quienes se los moldea y se los pule.
Venezuela viene trabajando desde hace años para ponerse los pantalones largos en el torneo que cada cuatro años otorga plazas mundialistas. Dejó de ser la servidumbre de quien todos se aprovechan para obtener beneficios deportivos. Hoy pelea, guerrea, se pone de pie y cara a cara da lucha en cada partido.
Si hay algo que rescatar del polémico César Farías es que logró dar a los venezolanos la respetabilidad que nunca la tuvieron. Y hoy en la actualidad se le tiene una consideración muy especial, porque pudo emerger a la plataforma bajo el escudo de un trabajo procesual que está dando resultados gratificantes.
De no haber sido por el peso de la historia, el año pasado Paraguay hubiera quedado eliminada a manos de los petroleros en las semifinales de la pasada Copa América. Esa fue una cabal muestra del enorme avance en la construcción de una imagen que no pasó por la cabeza de los más optimistas de los venezolanos.
Brasil y Argentina dejaron de ser los dueños exclusivos de las grandes lides. Hoy “meten sus narices” los bisoños venezolanos y Paraguay, si no toma los recaudos se puede llevar una nefasta sorpresa mañana. Si anteriormente se ganaba antes del partido, hoy la actualidad manda que dentro del presupuesto general hay que incluir a un empate como mínimo, cuando que empatar en años anteriores representaba un verdadero fracaso para los nuestros.
Por: César De Pablos
Foto: EFE
LaVinotinto.com