Por segunda ocasión el delantero venezolano Emilio Rentería fue objeto de comentarios racistas en el partido que afrontaba su equipo, San Marcos, frente a Deportes Iquique, este pasado fin de semana. La reiteración del incidente ha provocado que el jugador evalúe su continuidad en el club que milita en la Primera División chilena, pese al apoyo recibido por parte del gobierno, la ANFP, seguidores y otros futbolistas profesionales.
Las declaraciones ofrecidas por el técnico uruguayo Nelson Acosta tomaron desprevenido a Rentería. “Sí, me sorprende. Él dice que no escuchó los insultos hacia mí pero cada quien escucha y ve a su modo”, dijo, acotando que “otra vez dice que fui a provocarlos. Yo creo que está equivocado y tiene que fijarse un poco más en las cosas que sucedieron”.
El ex atacante del Caracas también afirmó que no propició altercado alguno y que siempre ha celebrado sus goles de la misma manera. “Siempre he bailado cada vez que marco un gol como con O’Higgins, que fui al córner y bailé donde estaba la hinchada y me insultaron por bailar delante de la hinchada de mi equipo y esta vez bailé más lejos. Traté de evitar eso. ¿Cómo voy a ocasionar algo que me perjudica a mí?”, declaró.
En relación a las muestras de respaldo, iniciadas hace un par de semanas cuando el secretario de gobierno y la ministra de Deportes de Chile lo invitaron al Palacio de la Moneda para ofrecerle una disculpa por los acontecimientos, el ex jugador del Columbus Crew a manifestó su agradecimiento y destacó que “no todos son iguales”. “He recibido el apoyo de muchos chilenos, así que agradecido por eso; del gobierno, de muchos jugadores. Los de Arica siempre me han apoyado”, agregó.
A través de las redes sociales también ha recibido mensajes de apoyo. “Muchos me han escrito en el Twitter, algunos me han llamado; otros por canales de televisión” pero tengo que “sentarme con mi familia y mi representante” para evaluar “si dejo el club y salir de Chile”, apuntó.
Rentería aseguró que no ha sostenido reunión con los directivos de Arica aunque sí tuvo la oportunidad de dialogar vía telefónica con su mánager y con el máximo dirigente de ‘El Santo’. “He hablado con mi representante y obviamente con el presidente del club, que me dice que me tome mi tiempo , que esté tranquilo, que me espera; pero que también entienda que él no quiere que me vaya del club, que desea respetar mi contrato”.
“Hasta ahora solo he estado con el alcalde de Arica. Obviamente van a tomar medidas, no me dijo cuáles. También me llamaron de Santiago, del Palacio de la Moneda; me han mostrado su apoyo, que van a tomar medidas sobre lo que pasó el sábado”, añadió.
La familia es eje fundamental en la vida de Emilio, quien comentó el estado de intranquilidad que ha vivido su madre a raíz de aquel partido ante O’Higgings, cuya afición propinó mofas que lo han llevado a analizar su permanencia en el balompié del país austral. “A veces me llama llorando, diciéndome las cosas que me han pasado y duele. Si tengo que dejar el país, lo dejo por mi madre”.
Así mismo, resaltó que Napoleón Centeno, coordinador de la Vinotinto, se pronunció a su favor. “Me dijo que estaba conmigo, que me tranquilizara, que después hablaríamos y que me manda todo el apoyo el cuerpo técnico”, dijo.
Hace cuatro años se produjeron en canchas chilenas los últimos episodios de índole segregacionista cuando el argentino Matías Manrique tildó de ‘mono’ al ecuatoriano Giovanny Espinoza, sin embargo, no fue el primer caso. En 2003 el colombiano Faustino Asprilla y en 2004 el chileno de ascendencia judía Rodrigo Goldberg, también fueron víctimas de ofensas racistas.
Entrevista: Balón en Juego transmitido por Deportiva 1300 AM
Por: Caro Mejías
Foto: Archivo
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