El choque entre Liverpool y Manchester City, que el domingo se enfrentaron en la final de la Copa de la Liga, es el partido más destacado de la jornada 28 de la Premier League, en la que el líder, el Leicester, recibirá al West Brom.
Liverpool y City volverán a verse las caras apenas tres días después del triunfo de los de Manchester en el estadio londinense de Wembley en la “Capital One Cup'” (1-1 en el tiempo reglamentario, 1-3 en los penaltis).
Los “Reds”, que son novenos, con 38 puntos, confían en vengarse de los “Citizens” y lograr el miércoles una victoria necesaria para no dejar marchar el tren de los puestos europeos.
Se espera que Jürgen Klopp, que vio cómo sus hombres jugaron 120 minutos el domingo, haga rotaciones, y probablemente cuente de inicio con futbolistas como Divock Origi o Dejan Lovren.
El delantero Daniel Sturridge, que terminó el partido cojeando, y el defensa Mamadou Sakho, que tuvo que ser sustituido mediado el primer tiempo, son duda.
Por su parte, el City también necesita conseguir un triunfo que corte su pésima racha en la Premier y que le permita seguir soñando con el título de liga: “Es importante mantener la confianza en lo que estamos haciendo. En Premier nos quedan 36 puntos y vamos a pelear por cada uno”, dijo Manuel Pellegrini tras el triunfo en la Copa de la Liga.
El líder, el cada vez menos sorprendente Leicester, que en su último encuentro derrotó al Norwich en el minuto 89 con un tanto del argentino Leo Ulloa, vuelve a jugar en el King Power Stadium, esta vez el martes frente al West Brom del venezolano José Salomón Rondón.
“Para jugadores como Ulloa es clave entrar al terreno de juego y decidir los partidos. Pero no sólo él, todos están muy comprometidos y entienden la filosofía”, señaló este lunes el técnico del Leicester, Claudio Ranieri.
Los “Foxes”, en lo más alto de la clasificación, dos puntos por encima del Tottenham, recuperan al lateral Danny Simpson después de haber cumplido un partido de sanción, pero pierden a un futbolista clave. el centrocampista N’Golo Kanté, que se perderá los dos próximos encuentros por una lesión muscular.
El martes juega también el Chelsea, que prosigue su escalada en la tabla y vuelve a jugar lejos de Stamford Bridge. Los “Blues”, que pudieron el pasado sábado con el Southampton (1-2), visitan al Norwich sabiendo que un nuevo triunfo los acercará significativamente a los puestos europeos.
El español Pedro Rodríguez, que ante los “Saints” sufrió un problema muscular, se perderá el duelo, al igual que el defensa John Terry, que sigue en el dique seco.
“Pedro estuvo tratándose aquí (ciudad deportiva del Chelsea). Veremos después de unos días cómo va todo. Normalmente con estas lesiones necesito toda la información que me pueda facilitar el cuerpo médico. No soy muy optimista de que vaya a recuperarse en unos días”, dijo Guus Hiddink, entrenador de los londinenses.
La principal novedad de los “Blues” podría ser su último fichaje, el brasileño Alexandre Pato, totalmente recuperado de sus molestias.
“Está con ganas. Es positivo tener tanta competencia en los delanteros, pero con Diego (Costa) como número uno. Los jóvenes, además de Pato y Remy pueden competir también”, sostuvo Hiddink.
El Arsenal, tercer clasificado, confía en poder este miércoles con el Swansea en el Emirates Stadium y entrar de nuevo en la pugna por el título, a la que vez que el Manchester United, todavía exultante por su triunfo del domingo sobre los “Gunners”, busca ganar al Watford para meter presión a los cuatro primeros clasificados.
EFE
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