La meteórica progresión del Real Garcilaso en el escenario peruano e internacional tiene pocos símiles en el fútbol profesional. De reciente data, el equipo pasó del fútbol del interior peruano a estar entre los mejores ocho de América.
El 16 de julio de 2009 fue fundado con el nombre Asociación Civil Real Atlético Garcilaso, participando en la segunda división de la liga distrital de Cusco y logrando el ascenso a la máxima categoría regional. La idea surgió de la familia Vásquez Granilla, prósperos comerciantes del país incaico.
Al año siguiente, Garcilaso venció el Interligas de Cusco y tuvo acceso a su primer torneo nacional, la Copa Perú, en la que quedó eliminado en octavos de final. La consecuencia de esta clasificación fue la contratación de una pieza clave en el ahora club sensación del continente, su actual técnico, Freddy García.
En 2011 venció la Copa Perú y consiguió el acceso a la primera división. Para jugar en la élite peruana, García y los Vásquez Granilla decidieron apostar en grande fichando a jugadores relevantes del ámbito local y con una gran campaña, fortalecida en los partidos disputados en su estadio Garcilaso de la Vega en la altura de Cusco, llegó a la final.
Pese a la derrota contra Sporting Cristal, Real Garcilaso obtuvo el pase a la Libertadores. En el certamen continental, de nuevo fuerte en Cusco y sumando seis puntos en los minutos finales en los partidos de visita, el conjunto reforzado por los ex jugadores del torneo venezolano Víctor Ferreira y Alfredo Ramúa, alcanzó los octavos de final.
Los penales en el Centenario de Montevideo contra Nacional permitieron este jueves que, en menos de cuatro años de vida, el práctico y a la vez desenfadado equipo fuese el primero de su país en llegar a los cuartos de final coperos desde 1997. La llamada “Máquina Celeste” ahora apunta más alto.
Javier Rivera
Foto: Reuters
Lavinotinto.com
