El jugador, considerado como una de las mayores revelaciones brasileñas en los últimos años y que se resistía a su transferencia al fútbol europeo, firmó un término de compromiso que lo obliga a presentarse en el club catalán en julio, según fuentes próximas al delantero consultadas por el diario de Río de Janeiro, informó GolCaracol.com.
De acuerdo con la versión periodística, el partido del domingo entre Santos y Flamengo por la primera fecha del Campeonato Brasileño será posiblemente el último compromiso del jugador de 21 años con la camisa del club en que se formó y se hizo famoso.
El Santos, sin embargo, negocia la posibilidad de que el delantero ya consagrado en la selección brasileña pueda disputar un último partido después de la Copa Confederaciones en el que se despediría de los hinchas, agregó el mismo diario.
El compromiso firmado por Neymar fue fruto de las intensas negociaciones de las últimas semanas entre los representantes del jugador y del club catalán tanto en Barcelona como en Santos.
El delantero en sus últimas declaraciones insistió en su deseo de permanecer en Brasil, pero tanto el técnico de Santos, Muricy Ramalho, como dirigentes de la entidad brasileña emitieron que el futuro de Neymar está en España.
“Queríamos que se quedase en el club hasta (el Mundial de Brasil en) 2014 pero está difícil. El fútbol es un negocio en el que prevalece la ley del mercado”, afirmó el vicepresidente del Santos, Odilio Rodrigues, citado también por O Globo.
El traspaso también fue dado como un hecho por el seleccionador brasileño, Luiz Felipe Scolari.
“Neymar será una gran contratación del Barcelona. Será un gran ídolo junto a Messi”, afirmó el técnico campeón mundial con Brasil en 2002 en declaraciones que concedió en España el pasado domingo.
Pese a que O Globo no ofrece informaciones sobre el contrato, versiones de prensa brasileña indican que Santos aceptó finalmente la negociación luego de que Barcelona elevara su oferta desde 14 millones de euros hasta 17,5 millones de euros.
El contrato de Neymar con Santos se extiende hasta 2014 y prevé una rescisión de 65 millones de euros, pero el club perderá cualquier derecho económico sobre el jugador en caso de que aplace la negociación hasta el próximo año y el delantero opte por no renovar.
Según O Globo, el negocio podrá ser confirmado el miércoles tras la reunión que tendrá el Comité Gestor del Santos y en la que los dirigentes del club brasileño analizarán la última oferta de la entidad española.
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