Un notable Nápoles, del técnico español Rafael Benítez y con José Callejón como gran protagonista, endosó la segunda derrota liguera al líder Juventus Turín (2-0), en un partido de la trigésima primera jornada liguera italiana que los locales dominaron y controlaron en todo momento.
La derrota del Juventus en Nápoles, en uno de los duelos siempre más “sentidos” del “calcio”, no tiene demasiada trascendencia en la lucha por el título, pues la ventaja del conjunto turinés sobre sus inmediatos seguidores, Roma y Nápoles es de 11 y 17 puntos, respectivamente.
Sin el suspendido Carlos Tévez, excesivamente relajado, a menudo ramplón, y dejando sin conexión a sus delanteros (el español Fernando Llorente y el argentino Osvaldo).
No en vano desde el pitido inicial apareció un conjunto napolitano con mayor intensidad y presión, que encerró al rival en propio campo. El Nápoles se volcó sobre la meta de Buffon y pronto llegaron las ocasiones: Callejón (m.7 y 29), Hamsik (m.10). del Juventus en ataque, sin apenas noticias hasta casi la media hora.
El tanto napolitano estaba en el aire, y llegó en el minuto 37 tras un saque de falta diagonal a cargo de Insigne. Callejón (en posible posición ligeramente adelantada) le ganó la espalda a Asamoah y tocó lo justo para eludir a Buffon. Era un 1-0 que hacía justicia a lo visto sobre el campo.
El segundo tanto napolitano estaba más cerca que el empate, pues Buffon seguía viendo el peligro sobre su meta mientras que el español Pepe Reina apenas pasaba apuros. Y fue en un rápido contragolpe cuando llegó el 2-0 (m.81) que “mataba” el partido en favor napolitano.
Balón largo hacía Dries Mertens, que había saltado al campo apenas dos minutos antes, y el belga, en pelea con dos defensas, casi desde el borde del área, dispara cruzado sorprendiendo a Buffon.
El Nápoles se llevaba un triunfo que le mantiene en la lucha por la segunda plaza (a seis del Roma pero con un partido más) y, sobretodo, el “honor” que siempre tiene un choque contra un Juventus representante del “poder” del Norte. El líder sigue tranquilo.
EFE
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