César Farías y sus pupilos deberán esperar hasta el 6 de septiembre próximo para regresar a la actividad en las eliminatorias de cara al Mundial de Brasil 2014, sin embargo el seleccionador nacional de Venezuela, no esconde la ansiedad y el deseo que la espera genera, la necesidad de competir para afrontar el reto de clasificar por vez primera a la copa del mundo, es el principal tema de conversación: “Hoy siento el deseo de preparar todo y que llegue rápido la competencia. Quiero que luchemos y que lo hagamos como lo sabemos hacer, sumándole creatividad necesaria. Pero que llegue lo antes posible”, afirmó Farías en entrevista concedida al diario El Universal.
“Es la fe en que sí podemos y que no somos débiles de la cabeza. Por eso queremos competir. La competencia es la que suelta todo lo que necesita un verdadero hombre de desafío”, agregó.
La fortaleza del grupo que comanda, será fundamental para enfrentar los tres partidos que aparecen en el calendario a La Vinotinto, donde rivalizarán con Chile, Perú y Paraguay: “Hemos desarrollado un espíritu de cuerpo que cree en lo que hace. Que cree uno en el otro, y cuando hemos tenido que pegar espalda con espalda lo hemos hecho”, indicó
Venezuela que se encuentra igualada en la tabla de clasificación con Uruguay, ambos con 16 unidades, sabe que en este tramo final deberán poner la carne en el asador, y para ello la selección se ha preparado: “Hemos pasado por distintos niveles cumpliendo de esa manera con una fase de crecimiento importante en la cual correspondimos a cada exigencia. El primer nivel fue de diagnóstico, el segundo de planificación, el tercero de operatividad y ejecución, el cuarto de consolidación, el quinto de integración y el sexto de optimización. Ahora nos viene la etapa de innovación en este tramo final”, afirmó César Farías.
La “creatividad” será la herramienta a emplear, en tal sentido Farías apuntó a la capicidad de adaptación y de cambio que puede experimentar el jugador venezolano. “El fútbol es dinámico, constante, evolutivo y cuando uno logra emparejarlo en los niveles de exigencia necesarios de la competencia necesita tener a partir de ahí mucha creatividad para avanzar”.
La consigna está establecida, la prioridad es llegar a Brasil 2014, y ello empuja tanto al cuerpo técnico, como a cada integrante de la selección: “Es una obligación crecer y para crecer había que enfrentar y romper esquemas”.
Farías fue enfático y destacó que no es fácil observar los cambios: “Entenderlos hace ver que andas por la calle en contra vía a como vienen los demás. Por eso estoy convencido que lo único que hace cambiar son los resultados, pero para lograrlos debes cambiar y los cambios traen controversia. Estamos claros que la victoria no tiene sustituto”, acotó.
Aunque la necesidad de obtener la mayor cantidad de puntos en los tres partidos finales de las eliminatorias, sea el principal combustible que mueva el carro de la selección, el estratega venezolano precisó no entrar “esa diatriba” y dar lo mejor de cada uno para alcanzar la meta establecida: “Lo que tiene que suceder va a pasar y si hemos trabajado y hecho bien las cosas, llegará. Si no llega, tocará hacer una reflexión de país muy grande porque no es un problema de un ser humano, de un nombre, es de un proceso de país. Los actores cambian y siguen sus carreras, pero la vinotinto queda y debe preparar sus nuevos retos”, añadió.
El timonel de Venezuela, tomó tiempo para identificar el discurso, no muy positivo, que da por sentado que la Vinotinto no llegará a Brasil 2014, y prefirió corregir esta retórica en base a resultados en el campo: “Estando igual en puntos (con Uruguay, 16) no podemos estar eliminados. Eso es si nos rendimos. Las derrotas duelen y hay exigencias, es natural, pero no nos puede derrotar la fatalidad. Hay que jugar con la fe necesaria y toda la determinación que sea posible. Hay puntos en disputa y los vamos a pelear como acostumbramos en las dificultades”, expresó.
“El peor enemigo es el discurso apocalíptico que tenemos enquistado en todos los aconteceres del país. Sin embargo, hay quienes tenemos fe en que todo es posible”, sumó.
A pesar de que a priori Uruguay se presenta como el rival directo de Venezuela, pensar en una debacle de Chile también tiene cabida: “Todo es posible. Somos cuatro peleando dos cupos. Lo que hoy parece puede ser al final muy distinto. Pero plantear cosas así es buscar argumentos innecesarios. La pelea es uno a uno. Sin olvidar que Perú juega con Uruguay y con nosotros”, dijo.
Por César Peña
Foto: Carlo Dragone /Archivo
Lavinotinto.com
