Radamel Falcao está este martes en Mónaco últimando su fichaje por el equipo del multimillonario Rybolovlev, este megaproyecto que gastará dinero este verano como si no hubiera mañana. El Atlético perderá a su ‘9’, al referente de los dos últimos cursos, que se marcha a un equipo recién ascendido a la Ligue 1 francesa y que no jugará Champions League. El asunto está hecho, pero la oficialidad del fichaje se prolongará probablemente hasta el lunes.
El delantero colombiano desembarcará en Montecarlo (el lugar donde conmovió al mundo el pasado agosto con aquellos tres goles al Chelsea en la Supercopa Europea) dejando 60 millones por el camino. Como poco, Falcao doblará su sueldo y se unirá a las dos primeras contrataciones ya oficiales del equipo monegasco: Joao Moutinho y James Rodríguez (ambos por 70 millones de euros).
Su compatriota ya ha dejado caer Falcao y él van “a estar juntos” en el conjunto monegasco, en el que espera que hagan “cosas grandes”. “Obvio que es bueno -que jueguen juntos-. Con él yo ya había jugado y ahora que vamos a estar juntos va a ser algo bueno también. Me llena de orgullo estar con un amigo ojalá consigamos cosas grandes”, comentó Rodríguez en declaraciones recogidas por el diario colombiano ‘El Tiempo’.
También en el Atlético se da por hecha la marcha del colombiano, pero no esta semana, sino desde hace tiempo. El argumento, la imposibilidad práctica de mantener en nómina un sueldo de ese calibre. A partir de la confirmación de la huida del colombiano, se empezarán a concretar los recambios. En este momento, con opción Luis Suárez muy remonta, los principales nombres siguen siendo Mario Gómez, que saldrá del Bayern tras el desembarco de Lewandowsi, y Álvaro Negredo, por quien Gil Marín ha llegado a reconocer contactos. Pero el Alético es un club imprevisible, donde todos si coinciden en que un nombre galvanizaría la ilusión de la masa social, el de Diego Ribas. Una petición expresa de Simeone que el equipo rojiblanco tratará de cerrar en las próximas semanas.
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