Su primer rival, el páncreas, conoció de la capacidad de Pedrito para driblar y eludir. Estando en desventaja casi todo el tiempo, sobre la hora, Febles logró derrotarlo por la mínima. Los pulmones fueron su siguiente rival y allí estuvo mucho mas complicado. Sin oxígeno en casi todo el partido, tuvo que recurrir a la ayuda de un respirador para no perder por goleada. Se las ingenió a fuerza de lucha y perseverancia para salir victorioso luego de dos semanas conectado a esa milagrosa máquina. Para el partido final, ante el cerebro, ya Pedrito venía disminuido y la falta de oxígeno causada por su rival anterior, le causaron lesiones y pasaron factura que le han impedido la victoria ante tan importante rival.
En estos momentos se preparan para ir al tiempo extra. Sin ganador ni derrotado habrá que esperar unas cuantas semanas en este alargue angustioso y con grandes posibilidades de ir a la definición por penales o quizás por muerte súbita. Así de crudo es el diagnóstico de Pedro.
Su familia me ha encomendado la redacción de un comunicado a los medios y al público en general. En medio de su tribulación; Marlene, Danny, Gabo y Mariel sienten la necesidad de agradecer al país entero las innumerables muestras de apoyo y solidaridad recibidas a lo largo de estas eternas, larguísimas, tres semanas de lucha ante tan enconados rivales. Ellos también necesitan recargarse y enfocarse para ayudar a Pedro en esta definitiva incursión. Van a seguir necesitando de la fuerza de sus oraciones y del apoyo energético que emanan los miles de corazones que han pedido por la salud y sanación de Pedrito, pero al mismo tiempo imploran por un ambiente de paz y privacidad que le permitan lograrlo.
No se si equivoqué el estilo a la hora de cumplir el pedido de los Febles. Quizás pude haber utilizado otro tipo de redacción, pero confieso que luego de tantos cuentos, artículos, columnas, reseñas y notas de prensa, es primera vez que se me encomienda redactar un parte médico. Conociendo las reacciones y los gustos de mi hermanito Petrus, de haberle podido consultar el estilo de redacción, seguramente me hubiese contestado con voz ronca y tono cascarrabias: “Jaime Ricardo, haz lo que quieras pero hazlo bien” Ojalá dentro de algunos días lo puedas leer y que le des tu aprobación. Regresa pronto de donde quieras que te encuentres hermano, nos estás haciendo mucha falta. Ah! Lo que tienes se llama Coma Vigil".
