Fernando Amorebieta, autor del gol de Venezuela que derrotó a Argentina en la última jornada de la fase sudamericana de clasificación para Brasil 2014, ha afirmado hoy que, más que él, el héroe de ese partido fue “el equipo” venezolano, del que ha destacado su calidad y sus ganas.
“Más que yo, el equipo. Creo que tenemos un equipo bueno, trabajador y con mucho hambre de fútbol”, ha respondido hoy a los periodistas en el aeropuerto de Bilbao, a su regreso de Venezuela, cuando le han preguntado si se sentía el “héroe” de la ‘vinotinto’ por el tanto marcado.
El defensa del Athletic Club de Bilbao ha vuelto a mostrarse “muy contento” de haber tomado la decisión de jugar con Venezuela, su país de nacimiento, pero del que se fue a los dos años, cuando su padre, pelotari, volvió a casa, al País Vasco.
“Ha sido una experiencia muy buena para mí. La verdad es que no me lo esperaba. Ganar y marcar yo el gol de la victoria, ¡imagínate!. Ha merecido la pena la forma en la que me han recibido allí, la gente, el grupo que hay … la verdad es que estoy muy contento de haber tomado esa decisión”, ha comentado.
Amorebieta ha opinado que también ha disipado “ciertas dudas por parte de alguna gente, que no sabía si iba a darlo todo allí”.
“Siempre he dicho que iba con mucha ilusión y con muchas ganas. Luego, habrá partidos buenos y malos. Este ha salido bien y estoy muy contento”, ha apuntado.
En cuanto a la jugada del gol, un remate de cabeza a saque de córner, ha reconocido que le resultó inesperado porque es una acción en la que no se prodiga en el Athletic. “Aquí, normalmente no voy al balón, pero es un centro muy bueno de Arango, voy con ganas al balón y entra”, ha recordado.
Sobre el valor del triunfo ante Argentina, ha dicho que “al final son tres puntos”, si bien “muy importantes” con vistas a la clasificación para el Mundial de Brasil 2014.
Aunque no ha podido llegar para el entrenamiento de hoy de su equipo, Amorebieta se perfila titular para el próximo partido del Athletic, el choque liguero de este lunes ante Osasuna en San Mamés.
EFE
