El antesalista David Freese junto al primera base dominicano Albert Pujols y un “bullpen” dominante consiguieron imponer el poder de sus bates para que los Cardenales de San Luis hagan un nuevo viaje a la Serie Mundial del béisbol profesional como campeones de la Liga Nacional.
Aunque los Cardenales entraron a la fase final con el comodín de la Nacional, ganado en la última jornada de la temporada regular, completaron su remontada histórica con los triunfos en las series de división ante los Filis de Filadelfia y en la del campeonato ante los Cerveceros de Milwaukee.
Los Cardenales se impusieron por 3-2 a los Filis al mejor de cinco y por 4-2 a los Cerveceros al mejor de siete, con la victoria el domingo por 12-6 en el sexto juego, nada menos que en el Miller Park, de Milwaukee, donde sólo el local perdió 26 partidos en todo el año.
Aunque el 25 de agosto tenían desventaja de 10,5 juegos en la carrera por el comodín, los Cardenales iniciaron un surgimiento, que se combinó con el colapso de los Bravos de Atlanta para conseguir su boleto a la final, y ahora están de regreso en la Serie Mundial por primera vez desde que superaron a los Tigres de Detroit en el 2006.
La novena de San Luis, que logró marca de 30-13 desde el 24 de agosto, se unió a los Dodgers de Los Ángeles y a los Gigantes de San Francisco en sumar 18 viajes al Clásico de Otoño, y se colocan detrás sólo de los Yanquis de Nueva York, que suman 40.
Los Cardenales tuvieron registro de 15-5 en los últimos 20 juegos de temporada regular para asegurar su participación en las finales, después confiaron en su estelar Chris Carpenter para blanquear 1-0 a los Filis en el decisivo quinto juego de la primera ronda final.
Esta vez fueron dirigidos por el poder de Freese, nombrado Jugador Más Valioso (MVP) de la serie al conseguir .545 promedio de bateo, con tres vuelacercas, y nueve carreras impulsadas.
Mientras que el campocorto dominicano Rafael Furcal y Pujols también pegaron sendos jonrones que fueron decisivos.
Pero iba a ser Pujols el jugador clave junto a Freese en toda la serie al lograr .478 de promedio de bateo, dos cuadrangulares y nueve carreras impulsadas.
Su aportación hizo posible que los Cardenales a partir del miércoles comiencen la Serie Mundial en su campo del Busch Stadium, de San Luis, con el primer partido ante los Vigilantes de Texas, campeones de la Liga Americana, que repiten “Clásico de Otoño” por segunda temporada consecutiva.
Los Cardenales, que buscaran su segundo título en las últimas seis temporadas, volverán a apoyarse el poder de su bate, pero también en la gran labor que ha realizado un “bullpen” que ha sido decisivo al permitir que los abridores hayan lanzado sólo un 46 por ciento de las entradas de la serie ante los Cerveceros, el porcentaje más bajo en la historia de las Grandes Ligas.
La combinación del bateo explosivo y productivo de Freese, Pujols y Furcal que aportaron 11 imparables y nueve carreras en los tres primeros episodios colocaron a los Cardenales terceros en el apartado de títulos de Liga ganados, detrás de los Dodgers y los Gigantes, que suman 21 cada uno.
Para San Luis es su sexto título de Liga en la era de las series de campeonato por la liga, y la han ganado tres veces en las ocho temporadas anteriores.
Además el piloto Tony La Russa está aprovechando la eficiencia de su rotación, que terminó con 7.66 de efectividad esta serie, y su táctica de juego, con la que convirtió a los Cardenales en el primer equipo en fase final sin que ni uno de sus abridores alcanzara la sexta entrada.
Los Cardenales no cuentan con muchos apellidos reconocidos entre sus brazos relevistas, pero comprobaron una vez más que los apellidos no tan populares también pueden hacer una labor excepcional a la hora crítica.
La gran revelación ha sido el dominicano Octavio Dotel, que comenzó la temporada con los Azulejos de Toronto y luego llegó traspasado a los Cardenales para aportar su gran experiencia, veteranía y clase.
Dotel (2-0) ha salido en siete partidos en lo que va de la fase final para trabajar seis entradas y dos tercios con dos carreras permitidas –una fue limpia–, dio una base por bolas y sacó nueve ponches para dejar en 1.35 su promedio de efectividad.
También han realizado una gran labor de relevo el mexicano Fernando Salas, Lance Lynn, Marc Rzepczynski y Jason Motte para silenciar a los Filis y a los Cerveceros, que buscaban llegar a la Serie Mundial por primera vez desde la temporada de 1982.
Mientras, los Cardenales, tras la celebración por haber conseguido el banderín de la Liga Nacional, tienen previsto viajar hoy de regreso a San Luis, donde recibirán a los Vigilantes para intentar seguir por el camino del triunfo y la superación.EFE
